domingo, 24 de abril de 2011

A la moda.



Abrió el armario de los sentimientos y se puso algo acorde a la situación. Un ajustado pret-a porter de indiferencia. La moda del nuevo milenio, había llegado a todas partes.

5 comentarios:

  1. Me parece redondo. Me gusta mucho.

    Blogsaludos

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  2. Como dice Adivín, muy bueno Citizen!
    Voy a recomendarte a los incautos que no han pasado aún por aquí!
    Un abrazo!

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  3. Gracias Sucede, no te preocupes, con vosotros dos ya me llena el ego más de lo que debería. Me alegro que os guste.

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  4. Cada día aprecio más el valor de los microrrelatos. Son como esas frases que en medio de una conversación alguien suelta y tu cabalgar se frena, hacen meditar, recapacitar. Así me pasa con tu breve: No cabe duda de que todos tenemos "un armario de sentimientos" y que nos vestimos con él, la mayor parte de la veces de modo más acorde con la estética que con el sentir, pero sí, a veces elegimos el traje más adecuado para la ocasión. Este estándar de la indiferencia está muy comercializado, sin duda, somos cada vez más egoístas. Ha pasado un año desde que escribiste el texto, y ahí nos tienes, cada uno mira solo por "mientras no me toque a mi". En fin, Citi, que me haces pensar, lo cual por sí no es malo, todo lo contrario. Venga, nos vemos en las manifestaciones con el traje que toque.

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